Termina la temporada de verano y muchas de nuestras hortalizas empiezan a espigarse y a echar flores, esto significa que termina su ciclo. Tenemos la opción de recolectar las semillas de aquellas hortalizas que nos han dado buenos frutos, ó nos han gustado por su sabor. Simplemente tendremos que tener la paciencia de esperar a que las flores se sequen, y así las semillas estarán preparadas para guardarlas.
Si queremos guardar semillas de hortalizas de las que nos comemos el fruto, es decir, tomate, berenjena, pimiento, calabacin, calabaza, etc, tendremos que recolectarlas de aquellos frutos que más nos han gustado.
Este año voy a guardar semillas del tagete que he cultivado junto a las hortalizas. Ya he recolectado unas cuantas y las guardaré todo el invierno en un sobre de papel y dentro de un frasco de cristal.
Así que he tenido que esperar a que las flores se secaran.
Y entonces he recolectado las semillas que son así de originales. La naturaleza es sorprendente.
CONSEJOS para la conservación de nuestras semillas:
Las semillas deben guardarse en un lugar fresco y seco, la humedad y el calor harían que se estropearan y entonces nunca germinarían.
Si queremos conservar nuestras semillas es mejor hacerlo de hortalizas que sembramos con semillas ecológicas, y que nosotros hayamos cultivado ecológicamente. Estas semillas no tendrán ningún tipo de producto químico.
Intentar no conservar semillas de hortalizas que provengan de semillas híbridas, normalmente no suelen germinar.
Intentar no conservar semillas de hortalizas que hemos comprado en el super (tomates, pimientos, berenjenas). La mayoría de las semillas comerciales no ecológicas están modificadas para que no germinen después de un cultivo. Así los agricultores se ven obligados a comprar semillas todos los años.
BUENA COSECHA A TODOS ¡¡¡¡