No hay una hortaliza que nos recuerde más al invierno que la calabaza, y con la invasión Halloween y sus decorados llenos de calabazas mucho más. Sin embargo la calabaza es un cultivo de verano y que necesita mucho calor, y la tierra y el sol se unen y nos traen este fruto grande muchas veces y dulce casi siempre. De un tiempo a esta parte se han puesto de moda las recetas de calabaza, y a mi todo lo que sea resucitar hortalizas y utilizarlas en nuestra cocina me parece una gran idea. Y hoy contamos con una receta que ha querido compartir con nosotros Sonia del blog Entre Harinas.
CALABAZA ASADA CON SHITAKE
¿Cuánto hacía ya? Nunca hubiera imaginado que llegara a olvidarlo. Y sin embargo no fue facil. Las luces del comedor estaban encendidas y el bullicio de los críos empezaba a pasar del tono de juego al del enfado. Desde fuera no alcanzaba a ver qué hacían. Arriba podía ver a Luis en la boardilla que hacía de despacho. El olor a jazmín se accentuaba con fuerza. Tendría que haber cogido la rebeca.
De vez en cuando una conversación aparecía en la calle y desaparecía cuesta abajo. Podía reconocer cada una de las voces. Cuando decidieron dejar la ciudad y rehabilitar la vieja casa de la abuela, lo hicieron empujados por una crisis que no les dejaba muchas alternativas. Los niños eran pequeños y se adaptarían, ¿pero y ellos? Fue una apuesta arriesgada. Todo parecía más favorable, el ambiente más sano, menos competencia laboral, la vieja casa, pero el cambio les daba miedo. Dejarlo todo atrás.
Ahora desde fuera el naranja de la calabaza se fundía con los tonos rojizos del atardecer. Recogió la cesta, miró hacía atrás y cerró con cuidado la puerta de la entrada.
Ingredientes (para cuatro personas)
500 g de calabaza
14 shitakes frescos
Medio calabacín
1 cebolla
100 g de queso de Mahón u otro que funda bien (yo utilicé mozzarela)
Salsa de soja
Aceite de oliva
2 cucharadas de Pedro Ximénez
Nuez moscada
Sal
Elaboración
Precalentamos el horno a 160º. Cortamos la calabaza en dados y los disponemos en una fuente refractaria. Aliñámos con la sala de soja y aceite de oliva. Asamos la calabaza al horno durante 20-30 minutos.
Pelamos y picamos la cebolla y la rehogamos en una sárten con dos cucharadas de aceite y el vino a fuego lento, durante unos 20 minutos. Mientras cortamos el calabacin a dados bien pequeños y las setas. Sofreímos las setas y el calabacín en una sárten con tres cucharadas de aceite unos cinco minutos. Salamos.
Retiramos la calabaza del horno y la emplatamos junto con la cebolla. Sazonamos con una pizca de nuez moscada. Disponemos encima el queso en lonchas y horneamos un minuto para que se funda. Repartimos encima el salteado de calabacín y setas. Servimos enseguida.
Y si tienes huerto …. y aunque no lo tengas
La calabaza es una hortaliza cuyo cultivo se remonta al año 5000 a.c. en Méjico, aunque también se cultivaba en China. Es una hortaliza de la que se utiliza todo, su carne por supuesto, pero también sus semillas tostadas son un producto muy consumido. En yacimientos arqueológicos se han descubierto cucharas fabricadas con la corteza de la calabaza. Con la calabaza vacia se fabrican instrumentos, y formaba parte de los peregrinos del Camino de Santiago porque la utilizaban para guardar vino.
Hay muchísimas variedades de calabaza así como diferentes tamaños. Las más conocidas son las redondas y anaranjadas y las alargadas en forma de pera. Pero están las calabazas cuya carne se utiliza para hacer el cabello de ángel, las calabazas minis que son muy decorativas, o las grandes calabazas forrajeras. Todo un mundo el de la calabaza.
La calabaza es una cucurbitacea, de la misma familia que el calabacin, el pepino y el melón. Se tiene que sembrar entre marzo y abril, y se recolecta a partir de Agosto, y como su conservación es muy prolongada por eso las podemos consumir a lo largo de todo el invierno.
Es una hortaliza que necesita mucho espacio para crecer, mucho sol y riego regular. En un huerto urbano no es recomendable cultivarlas porque no se desarrollarán correctamente, pero si tenemos un huerto de tierra y disponemos al menos de un m2 para ellas se puede cultivar.
Cultiva tu Corazón Verde
No te pierdas el placer de tener un huerto en casa.
Buena cosecha a todos ¡¡¡