Hoy Jordi Petit nos trae otro de sus artículos, en el que nos explica cómo estas temperaturas tan extrañas que estamos teniendo han afectado a sus bulbos, pero leerlo detenidamente porque lo mismo puede pasar con nuestra hortalizas, ya que el crecimiento de cualquier planta sea ornamental ó comestible, depende de la tempertura medioambiental entre otros factores.
FENOMENOS EXTRAÑOS-POLTERGEIST
Nuestro pasado mes de Julio, fue en general moderado y hasta con lluvias. Tan suave fue que ocurrieron dos tipos de fenómenos extraños en mis jardineras a media sombra, con casi tres horas de sol suficiente (14,30-17 h). Mi balcón es la admiración de la calle. Las enredaderas tipo Ipomea (sembradas en abril), campanas rojas y azules, retrasaron su floración y la humedad del ambiente las hizo presa fácil de varias enfermedades, jamás me había ocurrido. Normalmente desde junio ya florecían y nunca enfermaron. Con tanto hongo y otros parásitos están hechas un desastre, ni el calor de mediados de agosto las salvó. Ahora salen algunas flores, pero hay que cortarlo todo y luego fumigar con un antifungicida polivalente. Que no quede rastro de las enfermedades. Encima nadie ha envidado las rejas de mi balcón. He quedado fatal ante mis fans del vecindario.
Nuestro pasado mes de Julio, fue en general moderado y hasta con lluvias. Tan suave fue que ocurrieron dos tipos de fenómenos extraños en mis jardineras a media sombra, con casi tres horas de sol suficiente (14,30-17 h). Mi balcón es la admiración de la calle. Las enredaderas tipo Ipomea (sembradas en abril), campanas rojas y azules, retrasaron su floración y la humedad del ambiente las hizo presa fácil de varias enfermedades, jamás me había ocurrido. Normalmente desde junio ya florecían y nunca enfermaron. Con tanto hongo y otros parásitos están hechas un desastre, ni el calor de mediados de agosto las salvó. Ahora salen algunas flores, pero hay que cortarlo todo y luego fumigar con un antifungicida polivalente. Que no quede rastro de las enfermedades. Encima nadie ha envidado las rejas de mi balcón. He quedado fatal ante mis fans del vecindario.
Ipomea
Los Múscaris, han sido víctimas también de estos cambios de temperatura. En mis macetas quedaban algunos bulbos que debía haber sacado de la tierra en junio o antes, pues florecieron en febrero-marzo y en mayo ya estaban secos. Me olvidé de los pobres bulbitos. Yo ya pensaba en las vacaciones. Mal hecho. Con la suavidad de las temperaturas de julio y algunas lluvias, los inconscientes múscaris volvieron a vegetar y a final de julio tenían ya 12 cm. o más. También ocurrió lo mismo con los múscaris de mi suegra, en su jardín del sur de Francia. Allí tiene muchos y yo observaba con horror que sería de aquella tupida alfombra verde oscuro. Pues vué la debacle total, el sol de mediados de agosto los secó en pleno desarrollo, tanto en Barcelona como en la región del Aude (sureste francés). Ignoro que sucederá con estos engañados y exhaustos bulbitos, imagino que si han vegetado fuera de temporada, y luego han sido pasto del dios RA, seguramente tengan menos reservas para este otoño. Veremos. Los observaré para saber si se han recupeado. No tenían culpa alguna. La verdad es que Julio César, que da nombre a este mes, fue muy voluble con el calor de los amores. En Roma era conocido como el hombre de todas y la mujer de todos.
Múscaris
Advertencia: Sin tener en cuenta estos fenómenos paranormales, al vaciar las jardineras a finales de agosto y septiembre, para prepararlas para una nueva plantación de otoño, (oxigenar, abonar y cambiar parte de la tierra) también me he encontrado con sorpresas. Los narcisos tazzeta o nadala (paperwhite) ya estaban con las raíces muy desarrolladas, una antelación que sólo se explica por el adelanto-engaño del calendario que supuso julio, y por ser la especie más precoz. Con mucho cuidado los he puesto en macetas a parte, con todas sus raíces. Supongo que con este septiembre-octubre tan calurosos, ralentizarán su desarrollo, pero ya que tienen raíces las regaré. Pobrecitos, no sé que será de ellos. Mientras sigamos con este otoño tan caluroso no plantemos los bulbos hasta que bajen las temperaturas, esperemos a finales de octubre. De lo contrario las plantas pueden confundirse otra vez, crecer rápidamente y luego quedar demasiado expuestas a las heladas de invierno. La mayoría de bulbos de otoñó precisan ser plantados en época de poco calor y desarrollan su sistema de raíces en otoño, para sacar sus primeros brotes a mediados-finales de febrero. Esperemos a plantar nuestros nuevos bulbos. Ahora mismo sería una condena tipo Santa Inquisición, quedarían expuestos, algo o bastante crecidos, al crudo frío invernal. La mayoría pueden no resistir la tortura. Quienes ya tengan bulbos en tierra, jardines por ejemplo, que no los rieguen nada de nada hasta que venga el otoño de verdad. Si llueve, mala suerte. Bailemos una danza por la sequía, que los embalses ya están llenos. Acordaros de regar con agua del grifo con un día de reposo, así se evaporara el clor. Con bulbos , mejor pecar de pocos riegos que de excesos. Abonar al principio de la vegetación, jamás al aparecer capullos, se quemarían las flores. Con humus mezcado en la tierra basta.
Jordi Petit
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¡Gracias por compartir estas informaciones! Tengo unos bulbos de azafrán que tenía que plantar a finales de setiembre, pero seguiré tus consejos y me esperaré al mes de octubre cuando bajen las temperaturas, así que de momento sigo con los cultivos de verano.
Un saludo,
Palmira
pues acabas de ayudarme un montón…. yo que compré unos bulbos y ayer mismo los planté…ya que está hecho lo dejo pero no los regaré!! Los que queria plantas con los niñ@s en el cole me espero a más adelante a ver si llega el fresquito.
a ver si hay suerte!!!!